Uno de los sectores más antiguos de la ciudad de
Santo Domingo, limita al Norte con Cansino 1, al sur con el alba, al este con
Cansino 2, y al oeste con el sector del Brisal. Mandinga es una comunidad
enclavada en el mismo centro de zona Oriental.
Esta comunidad
es conocida por su alegría, las ganas de seguir a delante, y hacer del
trabajo su fuente de vida, muchos describen
al sector como problemático y lleno de ladrones pero son más quienes
afirman que mandinga es una comunidad tranquila.
Los mandingas provienen de un grupo étnico de África
Occidental, los orígenes de este sector están estrechamente vinculados con este
grupo étnico, pues el sector se conformó con la población esclava que provenía
de la parte Francesa de la isla.
Al igual que la mayoría de los sectores de la
capital de la República Dominicana, el sector de mandinga tiene su pasado
enterrado en las entrañas mismas de la colonización y a su vez la llegada a la
isla de manera forzosa de los esclavos Africanos.
Esto queda evidenciado en el testimonio de la sr
Nancy Correa quien sostiene: “nosotras todas nacimos y nos criamos en Mandinga
y te lo podemos decir que antes aquí habían muchas supersticiones y brujos que
se acabó pero los tiempos han cambiado y con ellos la manera de pensar”
Caminar por las calles del sector sin lugar a dudas
es una gran experiencia, niños jugando, personas que caminan, la cotidianidad
transcurre de manera muy alterada en un sector con todas las
características de otros en la ciudad.
Pareciera que todas las vivencias de quienes habitan
allí, y acá en otros sectores estuvieran entretejidas a través de un hilo
común, y podemos hallar la respuestas en
la Africania que los hermana.
El ruido, los motores, los viejitos caminando, y la
sensación de estar en un lugar distante y a la vez cercano, parecería que el
tiempo no pasa en esas calles y sin embargo Don José nos dice: 'llegué a
Mandinga en el año 1978 todo esto era monte, recuerdo que donde está el parque
todo era una laguna, el tiempo ha transcurrido muy rápido', y sobre el nombre de
Mandinga dice: “eso era un Haitiano que vivía por aquí y por eso el barrio se
llama así”
Al igual que don José muchos jóvenes y no tan
jóvenes desconocen el origen de este nombre y la vinculación tan estrecha que
tiene con el pasado colonial.
Servicios Básicos en la comunidad
El sector cuenta con muchas deficiencias en cuanto a
servicios básicos, fue para el año 1953 se
instalo' el servicio de agua potable y ya para el año 57 había electricidad en
la comunidad.
Moradoras del barrio nos plantearon la problemática
de la recogida de basura, el camión de la basura pasa de largo y no se detiene
en la comunidad, lo que hace que la gente tenga que buscar donde tirar la
basura y esto hace que en el sector abunde la insalubridad. El servicio
eléctrico no está organizado, lo que hace que en la comunidad hallan malas
conexiones eléctricas, y esto a su vez
es la causa de incendios.
Siempre habrán miradas pesimistas sobre la vida, y la existencia en alguna comunidad, y es el caso de Gabriel Peralta un Herrero
que nos afirmó que en Mandinga no servía nada, es un sector lleno de
ladrones, prostitutas, y delincuentes, y nos hizo la aclaración de que el no
vivía en la comunidad pero pasaba el mayor tiempo posible allí pues tenía su
herrería en el sector.
La opinión de Gabriel contrastaba con la de María
Correa quien afirma todo lo contrario, en mandinga hay mucha gente buena, lo
que ocurre es que los malos resaltan demasiado, somos gente con mucha alegría y
muchas ganas de superarnos, aquí tenemos estudiantes, profesionales, gente luchadora que se la busca de forma honrada.
'Nuestra comunidad cuenta con una población amplia de
jóvenes que se desplazan al Centro regional de la carretera mella, o a la
Universidad Autónoma de Santo Domingo a tomar clases, gente que trabaja ,
estudia, lo que pasa es que la delincuencia hace mucha bulla por eso resalta tanto expresa Mari.
“el único deber que tenemos con la historia es
rescribirla”
Hugh Thomas
Es importante para un pueblo, una sociedad, o una
pequeña comunidad tener manejo o dominio de su historia, esto permitirá a lo
largo de su existencia que esta se perpetué a pesar de la llegada de gente de
fuera, que más que arrancar las raíces llegue a fortalecerlas.
Mandinga ha pasado por un proceso de transculturización,
con la llegada a la comunidad de personas de otros sectores lo que de alguna
manera ha hecho que desaparezcan ciertas manifestaciones culturales.
Caminado en unos de los peatonales del barrio, uno
de sus moradores más antiguos nos cuenta que antiguamente en mandinga se
bailaban palos, y las manifestaciones culturales dejadas por sus ancestros se
mantenían, con el paso del tiempo y la llegada de nueva gente a la comunidad
todo esto se fue perdiendo.
Caminar por el peatonal Hino es como transportarse
en el tiempo, cuando entras parece un simple edificio, cuando te adentras te
vas dando cuenta que hay todo un mundo en este callejón, mucha historia
guardada, que necesariamente debe ser desenterrada para qué quienes viven en la
comunidad la conozcan y se den cuenta que no viven en un lugar al azar. Que
cada lugar en Mandinga tiene su razón de ser, que ese nombre contiene una
historia que trasciende las fronteras del sector que está trascendencia los
hermana con otros sectores más de la capital y de la isla.
Reescribir la historia de mandinga es resignificar el
caminar por aquellas calles y saber que pasaron cosas, que nuestra historia ha
tenido algunos olvidos, y es necesario refrescar la memoria colectiva de un
sector que en suma es el país.
El señor
Sergio Cava Viñas, en su casita ubicada en el camino de Mandinga, al
lado de su madre una anciana de 106 años, y su hermano, l muy ancianos los tres con grandes ansiedad de hablar de contar,
de decir sus vivencias, de que el país les conozca y ese mismo país sepa que
están ahí, que vivieron del cibao, y que su madre tiene más de medio siglo
habitando está comunidad y aún sigue lucida, y en compañía de sus hijos.
Sergio Cava, nos habla de mandinga y con mucha
lucidez nos cuenta que era una tribu africana, y nos aporta un dato interesante, al
igual que Mandinga Mendoza es otra comunidad descendiente de africanos.
Ellos hablan de todo lo que han pasado en esta
comunidad y describen sus años allí como buenos, dan una mirada positiva a su
pasado, hablan de cuando todo era monte, las casas estaban distantes unas de
otras, y no había ni agua ni luz.
El futuro también lo miran de forma positiva, dicen
que es una comunidad tranquila, que al igual que los demás sectores del país
tienes sus deficiencias, pero también tiene fortalezas, y ellos resaltan esas
fortalezas, hablan de la tranquilidad que reina en el sector, de la convivencia
entre vecinos, y la fraternidad entre ellos.
Andar en Mandinga en moto concho es otra
experiencia, al tomar la carretera de mandinga y Doblar en la calle san José, el motorista nos cuenta
que el nació y se crió en el sector, nos plantea su alegría de vivir allí, y lo
único que le molesta según sus palabras es la falta de empleo que hay en la
comunidad .Pero en suma plantea que no viviría nunca en otro lugar, que ama su
barrio, y no se siente cómodo en ningún otro lugar.
Al igual que este motorista, muchos habitantes de
Mandinga dicen lo mismo, a pesar de los pesares, de la falta de empleo, y de
oportunidades se quedarían a vivir en este sector porque se sienten parte,
muchos nacieron y echaron sus raíces en la comunidad.
La Sr Nancy
Correa es una de esas personas dice: el sector está tranquilo, ya los ladrones,
y los tigueres que andaban haciendo averías están presos, nací aquí, todos mis
hermanas también, creo que hasta mi madre nació aquí, si me ponen a escoger
donde nacer volvería a nacer aquí, me siento muy orgullosa de ser Mandinguera, y no quiero saber de quién habla
mal del sector, los tiempo de miedo y peligro ya acabaron.